MARCHARTAZGO

Debo confesar que mi incursiòn en la marcha no fue totalmente por voluntad propia, dormì poco y no estaba del mejor humor, sin embargo la voluntad fèrrea y la insistencia firme propia de una ciudadana comprometida con su paìs, en este caso, mi señora madre, anunciando a viva voz que si no la acompañaba nadie ella se irìa sola, hizo que me vistiera en un par de segundos. Escèptico, lo acepto, fui con mi mamà a la super marcha del hartazgo, basta ya, manifestaba la mayorìa de los carteles, playeras, gorras, paraguas, pancartas de los asistentes a la marcha, en verdad jamàs me percatè de la magnitud del evento.

Sentìamos que èramos muchos, pero creo que la mayorìa no alcanzamos a darnos cuenta de la importancia de la marcha, una marcha organizada con muchìsima clase media, abuelitas (incluida mi Mamà Gelita), niños, jòvenes, juniors (incluido mi tio Manolo) maestros, artistas, intelectuales en fin, creo que es repetitivo dada la publicidad que se hizo despuès pero les cuento mi particular percepciòn.

En el camino desgarradoras historias, y pancartas denunciando los crìmenes màs atroces, miles de fotografìas de personas desaparecidas y/o secuestradas, de verdad lo juro, jamàs habìa sentido tanto miedo despuès de la marcha, es decir, la marcha desde mi paranoico punto de vista infundiò miedo a vivir en esta gran urbe de la que somos presos, despuès de la marcha regresamos a la casa y lo que sentì fue una inseguridad tal que no querìa salir a la calle. Sin embargo me gusta ser mexicano, me gusta mi paìs y me revienta sentirme liberado una vez que estoy fuera de èl, la Grandeza de Mèxico tambièn tiene que reflejarse en nuestro civismo.

Afortunadamente estoy fuera de Mèxico en estos dìas, y ya con menos paranoia reflexiono, que el miedo es fundado, sin embargo tenemos que seguir haciendo nuestra vida y *tener cuidado*

Hasta el dìa de hoy tengo una especia de mixfellings, me da mucho gusto haber participado en la marcha a la que mi madre tuvo a bien *invitarme* y saber que cuando nos està llevando la tristeza los mexicanos sì nos podemos unir, el hecho me recordò el tràgico terremoto que sucediò en 85 en donde veìamos a Plàcido Domingo buscar en los escombros por màs sobrevivientes, situaciòn que hasta la fecha sirve de ejemplo de solidaridad de nuestro pueblo, sin embargo tengo miedo de que la ruleta no estè de nuestro lado. Normal no?

La reflexiòn es en el sentido de que tambièn podemos unirnos cuando nos va màs o menos o cuando nos va bien, parece muy difìcil entender que mientras le vaya bien a tu vecino tambièn te va a ir bien a tì, el bienestar genera bienestar, hay que procurarnos un D.F. mejor, hay que generar empleos y trabajar màs. Chingao no podemos seguir asì....

TERMINO LEGAL.

Debido a los recientes y terribles acontecimientos he decidido dar un tèrmino prudente a mi gobierno a efecto de que nos proporcione mayor seguridad, en caso contrario no tendrè màs remedio que realizar la graciosa huida y desaparecer como Don Porfirio, no en el Ypiranga, pero sì a Parìs jejeje, o a lo mejor a Hawaii en realidad siempre he querido ser surfer.

P.D. Gracias a todos los que participaron en la marcha, sin saberlo, formamos en ese instante parte de la Historia de Nuestro Paìs. Mèxico ¿lindo y querido?