sábado, julio 03, 2004

EL FRACASO

En recientes publicaciones y con motivo de los Juegos Olímpicos próximos a celebrarse en Atenas, he leido muchas historias de los deportistas y del giro que ha tenido el deporte a últimas fechas, el artículo que más me llamó la atención fue uno dedicado a la hoy famosa Soraya Jiménez medallista de oro olímpico, quien anunció su retiro manifestando que había que buscar cosas nuevas y que lo de la levantada de pesas pues ya había sido y había que tirar para adelante.

Lo que me llamó más la atención fueron las palabras sabias que pronunció en medio de la entrevista, Nadie nos prepara para el fracaso, esto es una verdad absoluta. Siempre estamos luchando, llámese estudiando, trabajando, entrenando, esforzándonos, para lograr un triunfo, pero que pasa si después de todo ese esfuerzo realizado, de haber dejado la vida misma, de sacrificar muchas cosas, al fin y al cabo fracasas.

Cómo afrontar esa realidad contigo mismo, puesto que tal y como dice mi Padre, puedes engañar a todos menos a tí, ¿como explicarte que después de tanto esfuerzo al fin fracasaste,? ¿cómo levantar el vuelo?

Gracias a Dios y al cielo, la mayoría de nosotros somos personas *exitosas y triunfadoras* sin embargo eso no nos exenta de caer en un momento dado y puesto que hemos tenido la fortuna de ser triunfadores y exitosos, la caída inevitablemente sería más alta y por consecuencia más fuerte el trancazo, creo que es una cosa que jamás podemos olvidar, es preciso, saber o mejor dicho entender que los viejos refranes están cargados de sabiduría popular y el hecho de que *la vida es como la rueda de la fortuna* es una potencia constante.

Muchos amigos míos que entraron conmigo a la Escuela Libre de Derecho, no pudieron salir del gran reto que esto significó para todos en nuestra vida, de estos amigos, varios y con varios quiero decir más de cinco, a la fecha están frustrados porque no pudieron acabar en la Escuela Libre de Derecho, que a final de cuentas visto desde una realidad objetiva, no deja de ser una escuela, es decir, la vida no se acaba, pero al parecer para varios fue un trauma muy duro de superar. Otros, disimulaban no tener ningún problema y a la hora de emborracharse sacaban sus traumas exigiendo audiencia para poder justificar porque reprobaron o porque el maestro siempre la traía contra ellos.

Lo interesante es cómo hubiera manejado yo esa situación, y pongo el ejemplo para poder imaginarnos todos en nuestras respectivas vidas y actividades como hubiéramos reaccionado ante un fracaso evidente que vimos que padecieron muchas personas y de los cuales nosotros fuimos espectadores.

Por supuesto que todos hemos fracasado en la vida, sin embargo hoy en día es más difícil aceptar un fracaso o por lo menos para mí es así, no sé si sea por la edad o por el hecho de sentir que sí podemos o lo que sea.

Es necesario, entonces estar siempre preparados para poder hacernos un buen coco wash y saber que no siempre se puede, que el fracaso te da la oportunidad de empezar otra vez sabiendo cómo no debes de hacer las cosas, que levantar el vuelo es necesario y entre más rápido mejor, cómo hacerle..........

Como Dios nos de a entender

Que aviente la primera piedra aquél que nunca ha fracasado.