PERDON...

Perdonar, suele ser, al menos para mí, un acto difícil de llevar a cabo, creo que soy bastante tolerante, siempre y cuando no me encuentre en mis cinco minutos en los cuales es mejor ni voltearme a ver... como a todos nos sucede, supongo.

El perdón normalmente está directamente relacionado con la Culpa, en este orden de ideas nosotros estamos dispuestos a perdonar a una persona que consideramos culpable de alguna situación, acto, omisión etc. etc.

Después de algunas llamadas, de algunas discusiones, encuentros personales, argumentaciones o simplemente por el paso del tiempo que borra o cicatriza las heridas, estamos dispuestos a perdonar. El hecho de perdonar tiene un efecto liberador en el alma, al momento de perdonar a alguien, pero realmente perdonarlo de corazón....el alma se libera de algún peso, que seguramente tiene que ver con la energía negativa que está generando el sentimiento que tienes hacia esa persona sea odio, rencor, envidia, o simplemente mierda pura. Si logras realmente perdonar a una persona entonces se da el famoso abrazo de Acatempan y todos cuates, que final tan feliz chinga.....

Existe el otro lado de la moneda, esa culpa evidente sin cuestionamientos, ni justificaciones creibles o increíbles, claro desde tu punto de vista, que hace más difícil que sea acreedora a un perdón, esa culpa que el paso del tiempo no borra ni cicatriza, sino que, incluso, la incrementa, esa culpa y el culpable de la misma, adquieren un valor distinto dentro de la variada escala de los sentimientos que cada quien tiene.

Cuando alguien menciona a una persona que conoces, invariablemente viene a tu mente y a tu corazón algún tipo de sentimiento, que dicho sea de paso no necesariamente coinciden, así puede tu mente decir este wey es una mierda y tu corazón decir pero como me cae bien el cabrón, con alguna persona que consideraas culpable el sentimiento que viene a tu mente y corazón siempre coincide al menos en una cosa, a saber en que el sentimiento provocado, sea cual fuere, es negativo.

Esa negatividad que sientes y que incluso muchas veces manifiestas a efecto de que tu interlocutor sepa que te caga la madre como ...... mmmmta, mejor de ese wey o esa vieja ni me hables, porque..... bueno prefiero no hablar, y el hecho de no hablar curiosamente despierta la curiosidad inevitable y descubre el hecho evidente de que estás enojado con esa persona, por muchas razones, sólo tu sabes que es porque lo consideras culpable de alguna situación determinada y literalmente prefieres no hablar porque te causa incomodidad, o despierta ese dark side que todos tenemos.

Ese sentimiento negativo que brota con la gente que consideramos culpable, nos carcome y violenta nuestro organismo, sin embargo es imposible no sentirlo, sabemos que nos hace daño y aun así aunque sabemos que no es racional, no es sano y nos vale madre, simplemente brota esa carga o mejor dicho descarga de ira, de negativismo que aunque cuando estás tranquilo sabes que está mal y que exageras, cuando estás en un punto determinado te vale madres....

Después de varios eventos extremos en mi vida he experimentado estas dos culpas, la perdonable y la imperdonable, hace poco incluso llegué con una persona a manifestar "mi perdón", a lo que mi interlocutor dijo a mi, a mi me perdonas, no mames, y porque, lejos de encabronarme me dio risa y me hizo recordar una vez más que cada cabeza es un mundo y que el hecho de que le dijera a esa persona de mi familia que lo perdonaba le valiera madres no cambiaba que mi alma se sintiera más ligera y un poco más sana.....

Sin embargo existe esa otra culpa la imperdonable que no sé como manejar y que cada día que pasa se acrecenta y parece convertirse en una bola de nieve inmensa que será imposible parar, en fin...... creo que es entendible....

Como dice Fito.
No olvides que el perdón es lo divino y raras veces suele ser humano.....