SENTIMIENTO DE PERTENENCIA II

Hoy más que nunca extraño mi equipo de futbol, claro el de cuarto de prepa, ese equipo de verdad que era invencible, si bien no ganamos el torneo de fuerzas básicas, el espíritu que se respiraba y la comunión y energía era indescriptible.

El hecho de sentirte perteneciente a un grupo es un sentimiento muy padre, claro además nosotros habíamos convivido desde la primaria en realidad era una gran familia desde hacía mucho tiempo.

Sin embargo esa EDEPREM (nombre que se le daba al torneo nacional de los maristas) tuvo un sabor peculiar, los entrenadores -tuvieron la gran idea- de mandarnos en tren, llegamos todos desvelados al tren y al momento de salir los tres equipos representativos del Cum de México, las reclamaciones y rencores salieron a relucir (claro después de unos tequilas que habían estado sirviendo los anfitriones del vagón 2, es decir los de basket ball, que siempre fueron un desmadre, pero esos sí eran invencibles)

En fin ellos reclamaban que a los de futball, es decir, a nosotros siempre se nos daba mucha preferencia lo cual desde luego era cierto, que nosotros teníamos casilleros, jacuzzi, entrenadores personales y los demás a duras penas llegaban a cancha, lo cual también era cierto, resumiendo les cagabamos y no nos podían ver (que fijados no???)

En fin después de unos tequilazos las cosas se relajaron y la convivencia cada día mejoraba, siempre nos íbamos a apoyar los unos a los otros (cosa que les reventaba a los de las demás escuelas, porque ellos no llevaban porras) en fin, todos estábamos motivadazos, tanto que el profesor Walo, el mismo que nos llevó a ver la película de Pink Floyd a la capilla, dijo, yo me comprometo a que si ganan las tres selecciones el primer lugar les ponemos una placa con todos sus nombres....

Orale, sonaba chido, en realidad la meta estaba muy difícil pero bueno era otra motivación, aun recuerdo la semifinal que jugamos contra Guadalajara, en donde ganamos 3-1 y nos tuvieron que sacar escoltados por policías, porque la gente literalmente nos quería linchar, después pasó lo mismo con basket y con volley, en fin nosotros fuimos los que ganamos primero, después fuimos a apoyar a los de basket que ganaron sin problema alguno, los de volley si sufrieron se fueron a cinco sets, estábamos clavados en animarlos y sacar el coraje que a veces (muchas veces) necesitamos.

Cuando ganamos absolutamente todos los miembros de la comunidad del D.F. se metieron al salón en donde nos concentrábamos y brincamos y coreamos y cantamos, nos bañamos con champagne, papas, hermanos, amigos, primos, entrenadores y jugadores unidos en un instante, que seguramente pasará por mi mente en las fotos que supuestamente ves cuando te vas a morir. Ese ha sido uno de los mejores días de mi vida.

El día de hoy por azares, encontré la foto de la placa que nos prometió Walo, es la placa más grande que está en el gimnasio, ahí están nuestros nombres, en las paredes y en la historia del Glorioso CUM, hoy ya no hay equipos, los amigos cada vez estamos más dispersos, sin embargo cada persona que vivió ese torneo, estoy seguro que siente lo mismo que yo.

Back in the summer of the 69.......................Bryan Adams